Jesús Clerico y Francisco Avendaño: 8 formas de proteger la playa en su próxima visita
A la gente le encanta pasar un día en la playa. Nos encanta preparar picnics. Nos encanta comprar papas
fritas saladas en nuestros trajes de baño. Nos encanta el sonido de las aves
playeras. Nos encanta saltar rocas por nuestros lagos y construir castillos de
arena. Nos encanta nadar hasta que se pone el sol y la sensación de arena entre
los dedos de los pies.
Es
importante recordar (y tan fácil de olvidar) que cuando estás en la playa local
o de vacaciones junto al mar, tus
acciones pueden dañar
la playa. Puede estar contribuyendo a la contaminación del agua en la que
le encanta nadar, dificultando la vida de la vida silvestre o dañando el
delicado entorno de la playa.
Los
siguientes consejos le ayudarán a asegurarse de que su día de playa no resulte
en daños significativos e irreversibles a su lugar favorito para nadar:
Cuélguese su basura
Labasura y otros contaminantes que deja en la playa impactan gravemente
el medio ambiente al contaminar el agua y poner en peligro la vida marina. El
cuarenta por ciento de la basura que se encuentra en las playas proviene del
público, y el 60-80% de esos desechos son plásticos. El plástico nunca se
descompone realmente y absorbe sustancias químicas tóxicas con el tiempo. A
menudo, los peces, las aves y otros animales marinos confunden el plástico con
alimentos, lo que los enferma y puede provocar la muerte. El tipo de basura
número uno que se encuentra en las playas son los envases de alimentos y
bebidas de un solo uso.
Si
no hay botes de basura en la playa, o si los botes de basura y las bolsas están
desbordados, llévese la basura a casa. Si nota que otras personas están dejando
basura, anímeles a desecharla correctamente o simplemente recójala usted mismo.
Cada vez que lo haga, podría estar salvando la vida de un animal.
Reconozca dónde está teniendo un impacto negativo
El
impacto en la playa es inevitable. Ya sea que esté participando en una
actividad acuática recreativa, comiendo pescado para la cena o simplemente
disfrutando de las olas rompiendo a sus pies en la playa, está teniendo un
impacto. Si no está prestando atención, probablemente esté haciendo algún daño.
Incluso
las actividades aparentemente más inofensivas pueden ser muy estresantes y
perjudiciales para los animales que viven, se reproducen, se alimentan y viajan
por la playa. Trate de evitar molestar a los animales. Esto es particularmente
importante cuando se reproducen o se alimentan.
No cree pistas de obstáculos para los animales.
Llevamos
muchas cosas con nosotros a la playa, incluidas sillas, muebles de playa y
sombrillas. Muchos de estos elementos parecen inofensivos, pero pueden enredar
o dañar a los animales. También pueden evitar que ciertos animales, como las
crías de tortugas marinas, lleguen al mar. Asegúrese de llevarse todo el equipo
de playa a casa.
No alimente a los animales.
Es
importante dejar que los animales salvajes de la playa encuentren su propia
comida. Alimentarlos hace que los animales pierdan su desconfianza natural
hacia los humanos. Cambia sus actividades naturales de alimentación y
migración, y disminuye su disposición a buscar comida por su cuenta. Alimentar
a los animales con alimentos que no son su dieta adecuada puede afectar
negativamente su salud al enfermarlos. Alimentar a los animales en la playa
también genera más desechos fecales, lo que conduce a un aumento de bacterias
en el agua.
Deje el entorno natural como está
Los
cambios o alteraciones del medio ambiente natural pueden destruir los hábitats
de las especies y, en última instancia, amenazar su supervivencia. Evite
caminar sobre dunas de arena. Las dunas de arena defienden la playa de la
erosión. Protegen naturalmente la playa de los efectos de fuertes tormentas de
lluvia y olas.
Elija productos de cuidado personal más seguros
Todo
lo que frote o rocíe sobre su cuerpo se lavará con el agua. Las lociones pueden
ser perjudiciales para el medio marino. Pueden matar o dañar los corales y
causar toxicidad en los organismos marinos. Los protectores solares comerciales
están llenos de nutrientes, como fosfatos, que se sabe que alteran negativamente
el ecosistema y promueven un crecimiento de las algas. En su lugar, busque
protectores solares que contengan ingredientes más seguros como zinc y titanio,
visite las playas fuera de las horas pico de UV o aplíquese protector solar una
hora antes de ir a la playa para que se absorba mejor.
No conduzca por la playa.
Conducir
en la playa puede dañar nidos, huevos, hábitat y vida silvestre. Los autos
atropellan la vida silvestre y también destruyen el hábitat natural de los
animales marinos al compactar la arena.
Sea consciente de sus acciones en casa
Dejar
una pequeña huella medioambiental en la playa empieza en casa. En última
instancia, cualquier cosa que arroje por el desagüe o por el inodoro puede
terminar en el agua y contribuir a su contaminación. Utilice productos
ecológicos como jabones y detergentes biodegradables sin fosfatos. Evite sobre
fertilizar su césped también. La escorrentía de aguas pluviales puede hacer que
el fertilizante termine en el agua, lo que provoca una sobrecarga de nutrientes
y la proliferación de algas.